Un joven sirio de 27 años de edad, al que se le había negado su solicitud de asilo en Alemania, ha muerto en una explosión que provocó frente a la sede de un festival de música en la ciudad germana de Ansbach, donde ha dejado una docena de heridos.
El suceso se produjo poco después de las 22.00 de la noche del domingo, junto a un bar de vinos cerca del que se celebraba un festival de música, que fue cancelado.
Unas 2.000 personas que asistían al concierto fueron evacuadas, al igual que varias viviendas y un hotel en las inmediaciones del lugar de la explosión.
El ministro de Interior de Baviera, Joachim Herrmann, ha confirmado en rueda de prensa que según las investigaciones preliminares, detrás de la explosión está un sirio de 27 años a quien se le había negado su solicitud de asilo en Alemania. Hoy se ha sabido que tenía una orden de expulsión a Bulgaria, pero no había sido ejecutada, seghún ha informado el portavoz del Ministerio del Interior, Tobias Platte.
«Según el estado actual de la investigación, el muerto era un sirio de 27 años que llegó a Alemania hace dos años y que solicitó asilo en el país», ha indicado el ministro en una rueda de prensa ofrecida tras la explosión y recogida por el diario local «NordBayern».
«Su solicitud de asilo fue rechazada el año pasado», ha añadido, si bien ha indicado que se le habría ofrecido un «permiso» de residencia, y que desde entonces había vivido en un albergue de Ansbach.
Según ha explicado en rueda de prensa Platte, se está investigando por qué no se le había expulsado del país, procedimiento del que son responsables los estados federados.
Platte ha explicado que los ciudadanos sirios a los que se les deniega una petición de asilo «en ningún caso» son expulsados en estos momentos a su país de origen, pero sí pueden ser devueltos a otros países europeos en los que fueron antes registrados.
En el caso del joven sirio sospechoso de haber provocado la explosión de ayer había constancia de su paso por Austria y Bulgaria.
Herrmann se ha mostrado profundamente «apenado» tras los acontecimientos de Ansbach en lo que ha definido como «el final de una semana más que difícil» para el país.
Y es que este nuevo suceso se produce después de que este mismo domingo, otro refugiado sirio de 21 años de edad matara a una mujer ehiriera a dos personas más con un machete en la ciudad alemana de Reutlingen.
El sospechoso fue detenido tras este ataque, perpetrado junto a un restaurante de kebab de la plaza de List, en el centro de la ciudad del estado de Baden-Wurtemberg.
