En la República Dominicana, la política de salud aplicada en los cuatreños 2012-2016, no ha servido para nada, es decir el panorama de salud es muy tétrico en la actualidad. Lo primero es que la Ministra de Salud, la Dra. Altagracia Guzmán Marcelino, está totalmente desactualizada de la administración y de la medicina y aún así sigue siendo la Ministra.
Luego hay que ver que las enfermedades que se consideraban erradicadas hacia años, de nuevo están de moda, por falta de prevención y cuidado, los salones de los hospitales están llenos, y la gente se muere y nadie le hace caso. En la República Dominicana los gastos médicos no tiene limites, pues un simple hospital, clínica o centro de salud lleva a cualquier familia a la quiebra absoluta, ya que cualquier internamiento sale por mas de RD$200,000 Mil Pesos y si el internamiento es de mas de 20 días, eso puede costar millones, como en la llamada Plaza de la Salud, que ahí si es verdad que la cosa es dura, allí no juegan, pues todo es mucho miles y millones y si no hay dinero para pagar quedan secuestrado, sean que vivan o que se hayan muerto.
La Ministra de Salud y ese ministerio inoperante, dicen que quitaron la cuota de recuperación y lo mismo anunció el gobierno falaz actual, pero la verdad es que, aquí hasta para morir hay que ser rico, sino debe de morir en otro país.
Diariodespertar.com ha recibido denuncia de la Plaza de la Salud, por el elevado costo de cobro por internamiento, medicina y atención médica, y eso es dirigido por un supuesto patronato donde está involucrada la iglesia católica, pero eso ta feo ahí, eso es un robo público, tanto en esa plaza como en los demás centros clínicos con muy mínimas excepciones, y el gobierno que adula de ser bueno no hace nada, la población está desamparada al intemperie sanitaria, mientras la ministra come muy buenos manjares en su casa con su familia disfrutando del lujoso salario que tiene para no hacer nada por el país en materia de salud.
La política de Salud del gobierno dominicano quebró, las enfermedades aumentan, entre ellas las catastróficas, como VIH, Cáncer, enfermedades de la piel, respiratoria, estomacales. Sin ninguna duda este país está siendo devastado por las siete plagas de Egipto, y las posibilidades no son buenas para el futuro. En definitiva, el que no tenga millones que no se enferme y si se enferma es mejor morir con honor y no en la mentira asquerosa del gobierno y del Ministerio de Salud.
¡Dios nos ampare y proteja!
