Los Trastornos de la Conducta Alimentaria

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“Acuérdate de que lo tienes todo, hasta que pierdes la salud”.

Por: Haizea Jaio Sanz
Revista Ávila en Salud.

La ortorexia es un trastorno obsesivo que supone un control exhaustivo y cada vez más estricto de los componentes de los alimentos. El miedo a ganar peso es una de las características de la Anorexia. Después de los atracones aparecen las conductas compensatorias, como la provocación del vómito o el uso de laxantes.

El hecho de comer no radica únicamente en que es imprescindible para la salud, sino que la mayoría de nosotros disfrutamos haciéndolo. Sin embargo, la forma de hacerlo cambia entre unos y otros, tanto en la cantidad como en la calidad de lo que comemos. Unos comen más, y otros comen menos, unos suben de peso y otros menos. Pero al comer demasiada cantidad, o demasiado poco, podemos llegar al extremo de perjudicar nuestra propia salud y precisar atención médica. En nuestro España, aproximadamente el 5% de los jóvenes entre 12 y 18 años de edad sufren algún tipo de trastorno alimentario según los datos de la Asociación Española contra la Anorexia y la Bulimia. Y en una proporción de 10:1 a favor de las mujeres. La etapa de la adolescencia se presenta como un período de cambios, de poca estabilidad emocional, en la que la adquisición o abandono de hábitos se ve muy influida por el entorno, más que por la idea propia. Esta situación, que se da en diversos aspectos de la vida de los jóvenes, también se refleja en su alimentación. Se trata de una etapa en el que uno se tiene que aceptar así, como es, gordo, flaco, alto, bajo, etc., o por el contrario, puede no hacerlo. Pero en este aspecto también influye la moda y es así, y aquí donde empiezan los problemas: “estoy gorda”, “me sobra por aquí”, “tengo poco de allá” y un largo etc. Es por ello, que el inicio más frecuente de este tipo de trastornos lo encontramos en la juventud.

Podemos definir los trastornos de la conducta alimentaria (TCA) como “todas aquellas enfermedades caracterizadas por una desviación de la conducta alimentaria normal, en relación a unas características emocionales y a unas creencias particulares respecto a la comida y a la imagen corporal”.

Se plantea la existencia de un TCA en aquellas personas que presentan una conducta alimentaria alterada, ya sea en su cantidad o estructura (horarios de comida, organización de menús, etc.), y frecuentemente en ambos, basándose en unas creencias peculiares o patológicas respecto a la alimentación, alteraciones en la percepción y valoración de su propia imagen corporal, junto con otros síntomas característicos a nivel emocional como inseguridad, baja autoestima o dificultades para el manejo de sus emociones. Los TCA, están clasificados dentro de dos sistemas internacionales de clasificación para trastornos de salud mental: el DSM-IV-TR y el CIE-10. Estos describen las tres categorías de TCA en: Anorexia, Bulimia y Trastorno Alimenticio No Especificado (según DSM-IV-TR) o Trastornos Alimentarios Atípicos (según CIE-10). En referencia a los Trastornos No Especificado, se podría decir que unos hábitos saludables agruparían conductas alimentarias regulares, como 3 ó 4 comidas al día, comer cuando uno tiene hambre, o incluso por razones sociales como pueda ser una fiesta. Por ello, el comer de forma irregular, saltándose comidas, picotear, darse atracones, o comer en respuesta a emociones o sentimientos de forma no controlada, condiciona una relación alterada con la comida, la cual sería preciso mejorar para que esta no pase a ser conflictiva.

Dentro de estos Trastornos Alimenticios No especificados, encontramos la Ortorexia. La ortorexia es un trastorno obsesivo que supone un control exhaustivo y cada vez más estricto de los componentes de los alimentos, y que afecta al 28% de la población occidental. Este tipo de trastorno de la conducta se diferencia de otras alteraciones alimentarias más conocidas, como la anorexia o la bulimia, en que el problema gira en torno a la calidad y no a la cantidad de comida. Esa búsqueda de la “alimentación perfecta” nos puede llevar a enfermar también. Este tipo de trastorno parece no afectar a los sectores marginales de la sociedad, pues se trata de alimentos más costosos de conseguir. Y es que parece que la sociedad actual tiende a los extremos y las personas o se cuidan en exceso o no se cuidan nada.

La Anorexia Nerviosa (La palabra anorexia sola, hace referencia a un síntoma caracterizado por falta de apetito que puede ocurrir en estados febriles, enfermedades generales y digestivas o simplemente en situaciones transitorias de la vida cotidiana) es un TCA que agrupa las siguientes características definitorias:

• Rechazo a mantener el peso corporal igual o por encima del valor mínimo normal considerando la edad y la talla.

• Miedo intenso a ganar peso o a convertirse en obeso, incluso estando por debajo del peso normal.

Alteración de la percepción del peso o la silueta corporales, exageración de su importancia en la autoevaluación o negación del peligro que comporta el bajo peso corporal.

En las mujeres pospuberales, ausencia de menstruación (amenorrea) por ejemplo, ausencia de al menos tres ciclos menstruales consecutivos.
Dentro de esta, es preciso especificar tipo, pues hay Anorexia Nerviosa de tipo compulsivo/purgativo, en el cual el individuo recurre regularmente a atracones o purgas (p. ej., provocación del vómito o uso excesivo de laxantes, diuréticos o enemas) o el tipo restrictivo en el cual no se da esto.

Por su parte, la Bulimia nerviosa, se caracteriza por la presencia de los siguientes signos para definirla:

• Presencia de atracones recurrentes.

• Conductas compensatorias inapropiadas, de manera repetida, con el fin de no ganar peso, como son provocación del vómito; uso excesivo de laxantes, diuréticos, enemas u otros fármacos; ayuno, y ejercicio excesivo.

• Los atracones y las conductas compensatorias inapropiadas tienen lugar, como promedio, al menos dos veces a la semana durante un período de 3 meses.

• La autoevaluación está exageradamente influida por el peso y la silueta corporales.

Y al igual que en la Anorexia, dentro de la Bulimia podemos especificar tipo purgativo en el cual durante el episodio de bulimia nerviosa, el individuo se provoca regularmente el vómito o usa laxantes, diuréticos o enemas en exceso, y el no purgativo.

Como podemos percibir, es frecuente que una persona presente algún rasgo de TCA, y que éste le condicione no solo la salud física, si no la psíquica e incluso la social. Pues la sociedad en la que vivimos nos condiciona enormemente en lo que comemos, estándares de belleza inalcanzables, “comida basura”, etc., pudiendo sus “presiones” influirnos en el origen de una conducta alimentaria alterada, y una relación conflictiva con los alimentos. A veces olvidamos que para vivir sano es muy importante una dieta sana, que somos lo que comemos y que nos pensamos que lo tenemos todo, hasta que uno pierde la salud.

Artículo publicado por Revista Española Ávila en Salud, en colaboración con Diario Despertar y SAMI XXI SL. Puede acceder a la revista en www.emstore.es