Por: Mercedes S. Peralta Gámez, Revista Ávila en Salud
La osteoporosis es el tipo más común de enfermedad ósea y esta causado por la disminución del tejido que forma los huesos. Este es un tejido vivo, formado principalmente por calcio y proteínas, que se va reemplazando a lo largo de la vida, por lo que cuando nuestro cuerpo no es capaz de hacer suficiente hueso nuevo, cuando necesita reabsorber demasiado calcio del hueso, o cuando ha habido una falta de masa ósea durante el crecimiento, se produce la osteoporosis. El diagnostico de la osteoporosis se hace mediante la desintometría ósea, que mide la cantidad de masa ósea del esqueleto.
La principal causa de osteoporosis en la mujer es la menopausia, puesto que el descenso de hormonas ocasiona una perdida rápida de hueso, esto unido a que las mujeres tienen menor masa ósea que los hombres, hace que sean más propensas a padecer osteoporosis.
Otra causa puede ser una alteración digestiva que no permita la absorción de calcio, o episodios de desnutrición en los que el aporte de este mineral no sea suficiente. Además, algunas enfermedades endocrinas, ciertos fármacos, estar en cama durante largos periodos de tiempo o el consumo de alcohol, tabaco o cafeína en exceso, pueden acelerar la enfermedad.
La osteoporosis es conocida como la “epidemia silenciosa”, puesto que no provoca síntomas, aunque si tiene complicaciones como fracturas, siendo estas más habituales en la columna vertebral, muñecas y caderas. Por lo que tendremos que tener cuidado con las caídas y los golpes, especialmente con las heladas en invierno que provocan suelos resbaladizos.
Para que el calcio pase a formar parte de los huesos necesita la vitamina D, ésta es producida por nuestro propio cuerpo gracias al sol, o se encuentra en algunos alimentos como mantequilla, pescados y cereales. Pero no es necesario ponernos a tomar el sol para conseguir vitamina D, simplemente con una dieta equilibrada y el sol que recibimos al pasear o al hacer las actividades diarias es suficiente.
Está demostrado que el ejercicio mejora la formación de huesos pero, deberemos evitar los deportes que tengan riesgo de caídas y traumatismos, siendo adecuados el baile, el yoga, caminar… además de llevar siempre un calzado adecuado.
Además la dieta deberá ser rica en calcio, con alimentos como leche, queso, pescado azul…siempre teniendo cuidado con las grasas, siendo preferible tomar lácteos bajos en grasas. Nuestro médico nos aconsejara sobre si debemos tomar algún aporte extra de calcio, vitamina D u otra medicación.
Artículo publicado por Revista Española Ávila en Salud, en colaboración con Diario Despertar. Puede acceder a la revista en www.emstore.es
