La economía crece 6.7%, pero flujo de IED y exportaciones caen 2.6% y 21%

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SANTO DOMINGO. Bajo la ovación por una boyante economía, Héctor Valdez Albizu, gobernador del Banco Central, fue recibido ayer por los centenares de empleados que colmaban el auditorio para escuchar su discurso conmemorativo por el 68 aniversario de esa entidad monetaria.

Entre repetidos aplausos, Albizu informó que la economía registró un crecimiento acumulado de 6.7% durante los primeros 9 meses del año, y que, de mantenerse el ritmo de crecimiento del segundo trimestre, la economía domi- nicana podría terminar creciendo por encima de 6.7%.

Es “posiblemente el mayor crecimiento de Latinoamérica, proyectándose que la misma crecería cerca de su potencial el año entrante”.

Según el funcionario, este crecimiento se apoya en la construcción (17.8 %), el comercio (9 %), enseñanza (8.8 %), intermediación financiera (7.9 %), transporte y almacenamiento (6.2 %), salud (6.2 %), hoteles, bares y restaurante (5.9 %), manufactura local (5.7%), zonas francas (5.4 %) y otros servicios (3.8%).

En contraste, la agropecuaria, afectada por la sequía, apenas creció uno por ciento, mientras la explotación de minas y canteras, afectada por los bajos precios internacionales del oro, se desplomó en 9.1%. Asimismo, el elevado crecimiento de la economía dominicana contrasta con la caída en 2.6 % de las exportaciones de bienes, presionadas hacia abajo por el decrecimiento de las mineras (-20.8 %) y de las industrializadas (-6.5 %). También contrasta con la reducción de inversiones extranjeras directas, que cayeron en 21 %.

Pero el crecimiento en el flujo de remesas (7 %) y de los ingresos del turismo (8.5%), y una significativa reducción de la factura petrolera que ahorró al país US$1,067.6 millones, contribuyeron a que el déficit de cuenta corriente de la balanza de pagos bajara en US$704.4 millones, y quedara en menos de US$441 millones.

Déficit fiscal

Valdez Albizu destacó que la política monetaria y financiera “han estado acompañadas de “una ejecución fiscal prudente y racional”. Prevé que al cierre de 2015, el Gobierno alcance un superávit primario (que no incluye los intereses de la deuda pública) de 0.4% del PIB, y que el déficit fiscal esté en torno al 2.4% del PIB.

Este déficit contrasta con lo informado por el Banco Central para el primer semestre del año. En su informe para ese periodo sostuvo que “el resultado de las operaciones financieras del Gobierno Central arrojó un superávit de RD$53,934.9 millones, monto equivalente a 1.8% del PIB estimado para el año”.

Justificó ese resultado en “el aumento significativo de la partida donaciones, debido esencialmente a la compra con descuento del 98% de la deuda correspondiente al Programa PetroCaribe”.

Pero tres meses después, en lugar de ese superávit, presenta un déficit.