DAVOS, Suiza. Gran Bretaña y Alemania dieron el jueves su respaldo crucial para la permanencia de Christine Lagarde al timón del Fondo Monetario Internacional durante un segundo período. Pero la francesa no confirmó si desea continuar en el puesto.
Lagarde ha recibido elogios por su conducción del organismo multilateral, que ha coordinado rescates para diversos países y vigila las reformas económicas en el mundo. Sin embargo, los países en desarrollo objetan la norma tácita de designar a un europeo al frente del FMI. Hasta hace poco, su organización hermana, el Banco Mundial, era dirigida por un estadounidense.
La reciente modificación a la baja de los pronósticos de crecimiento mundial del FMI y el futuro de Lagarde son temas de discusión esta semana en el Foro Económico Mundial en Davos, Suiza, donde la francesa es una presencia destacada.
El jefe de la hacienda británica, George Osborne, dijo en un comunicado el jueves que su gobierno la postulaba para continuar en el puesto.
“En momentos que el mundo enfrenta lo que yo he llamado un cóctel peligroso de riesgos, creo que Christine tiene la visión, la energía y la perspicacia para ayudar a manejar la economía global en los próximos años”, afirmó.
Poco después, el ministerio de Hacienda alemán dijo que Lagarde fue una “administradora sagaz y eficiente de las crisis durante el período difícil después de la crisis financiera”.
Habitualmente los países proponen a su candidato antes de que éste declare su intención de postularse.
En un panel en Davos, Lagarde agradeció las postulaciones pero no quiso confirmar si aceptaría continuar una vez que finalice su período en julio.
“Esperaré antes de decir nada sobre eso”, afirmó.
El Foro Económico Mundial al que asisten líderes empresarios y políticos se desarrolla en medio de la turbulencia en los mercados mundiales y problemas geopolíticos de seguridad.
Con respecto a la desaceleración de la economía china, Lagarde dijo que Beijing debe mejorar la comunicación de sus reformas y políticas de mercado.
Un regulador del mercado chino dijo que los temores de la jefa del FMI eran exagerados. Sostuvo que China no tiene otra opción que apoyar el crecimiento este año y recurrir a sus grandes reservas financieras en caso de necesidad.
“No podemos permitir que la tasa de crecimiento caiga demasiado bruscamente porque eso provocaría muchos problemas financieros en China. De manera que este año tendremos una política fiscal y financiera expansiva en la medida de lo necesario”, dijo Fang Xinghai, miembro del Grupo Dirigente de Asuntos Financieros y Económicos.
Ray Dalio, presidente de Bridgewater Associates, dijo que la moneda china era causa de preocupación. A medida que se debilita, será un lastre para la economía mundial al perjudicar el comercio.
