Santo Domingo. La capitana de la selección nacional de voleibol femenino, no estará al frente de su tropa en el torneo clasificatorio olímpico, que se disputará en Nebraska, Estados Unidos, los días 7, 8 y 9 de enero. La recuperación de Bethania de la Cruz amerita más de tiempo, y su falta hace la carga más pesada.
El pasado martes, oficialmente, se supo de la lamentable ausencia de la salidora del equipo nacional y una de las mejores del mundo en su posición. “Es una jugadora muy importante para nosotros. Pero ya sabíamos que iba a ser muy difícil, teniendo en cuenta la lesión que tuvo”, dijo el entrenador del equipo nacional el brasileño, Marcos Kwiek. “Lo más importante es que se recupere bien, para que el próximo año pueda estar junto con nosotros en todas las competencias”.
De la Cruz fue operada el pasado mes de agosto de su hombro derecho y se le dio de cuatro a seis meses para su recuperación.
Ahora que formalmente ya no estará, algunas compañeras tendrán más responsabilidad. “Cualquier entrenador si no puede contar con una jugadora como Bethania va a tener dolor de cabeza, obvio”, señala Kwiek. “Pero eso es parte del atleta y hay que estar preparado para todo”.
De la Cruz estuvo en el sexteto estrella de la Champions League en 2014 como la mejor salidora. Ella fue clave para que su equipo Eczacıbaşı VitrA (Turquía), ganará por primera vez la Liga de Campeones.
La responsabilidad recae ahora en cuatro jugadoras: “Todavía no tenemos el grupo de las 14 que van para el clasificatorio. Ahora mismo se tienen que echar la carga Prisilla Rivera, Anneyrs Valdez, Gina Mambrú y Brenda Castillo”, señala Kwiek. No tanto así para Brayelin Martínez. “Brayelin puede aportar, pero no para echarle la responsabilidad. No está lista para eso ahora, por su juventud”.
