El Senado de la República convirtió ayer en ley el proyecto que crea el Instituto Dominicano de Meteorología (Indomet), para colocarlo en el organigrama estatal como la entidad encargada de regular las actividades e informaciones climáticas del país.
El Indomet, según establece la pieza legislativa de la autoría del diputado Gilbert Balbuena, tendría autonomía en la toma de decisiones y contaría con una partida económica asignada en el presupuesto general del Estado. Esto, a pesar de que estaría adscrito al Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MMRN).
¿Qué pasará con la Onamet?
La Oficina Nacional de Meteorología (Onamet), luego de que la ley sea promulgada por el Poder Ejecutivo, deberá trasladar en un plazo de un año al Indomet las apropiaciones presupuestarias, competencias legales y responsabilidades, obligaciones contractuales y pasivos financieros.
Además de eliminar a la Onamet, la ley deroga el decreto 176-17, que coloca a esta oficina gubernamental como una dependencia del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC).
Funciones
Las funciones del Indomet serán establecer las estaciones de observación que permitan del estado del tiempo sobre República Dominicana, mantener sistemas permanentes de telecomunicaciones con los centros meteorológicos regionales y mundiales y suministrar información para la navegación aérea nacional, de acuerdo con lo detallado en la ley.
Además, deberá garantizar los protocolos de calibración en los instrumentos meteorológicos, emitir informes de alerta temprana ante sequías, monitorear los eventos atmosféricos, realizar estudios para eficientizar el uso de los recursos hídricos del país.
Otras responsabilidades son el suministro de asistencia técnica a la navegación aérea y marítima en los aeropuertos y puertos; mantener de manera constante la capacitación del personal público y privado vinculado al área.
Asimismo, gestionar el otorgamiento de becas para desarrollar en el campo las disciplinas relacionadas con la meteorología.
La iniciativa legislativa, que fue favorecida en segunda lectura por 19 senadores y contó con el rechazo de cinco, será enviada a la Presidencia de la República para su promulgación.