Un caso de estos es Thomas Martínez, quien ha tomado como decisión abandonar las comodidad de los vehículos de cuatro ruedas para hacer sus rutas en una patineta eléctrica por la ciudad de Santo Domingo, “abandonando su vehículo” para dar paso a esta nueva movilidad, la cual define más como “económica” y “rápida” a la hora de transportarse.
“Yo ando la ciudad entera con mi scooter, mis amigos me dicen que soy loco como a mi edad ando en una patineta eléctrica, pero la experiencia ha sido muy chula”, relató Martínez a este medio escrito.
Esta idea le surge a Martínez tras ir de vacaciones con su familia a la ciudad alemana de Mayhem. “Yo viaje con mis hijos a esa ciudad y todo el transporte que utilizamos para movernos en ella fue una patineta y pensé puedo hacer lo mismo en mí país y eso hago hasta ahora”.
La inspiración de Thomas Martínez ha sido de tanto alcance que ha creado su propia pequeña comunidad en Instagram bajo el usuario @andoenpatineta, en la cual anima a las personas a transportarse y adoptar este ritmo de vida.
Gilberto Cáceres, quien con 62 años se ha subido a la ola de las patinetas eléctricas, en tan solo dos semanas de uso recalca las bondades de la misma, enfatiza que es una de las mejores decisiones que pudo haber hecho, aunque continúe utilizando su carro para trayectos de viajes más largos.
“Yo me dirijo de la casa al trabajo y del trabajo a la casa, en este lapso de tiempo solo la he cargado una vez y casi no consume luz”, declaró Cáceres, quien recuerda que el tiempo que duraba en los tapones para regresar desde su hogar al trabajo y viceversa en la avenida Bolívar, lo que es por donde transita pasó de ser casi 35 minutos a terminar siendo en el patín de cinco minutos.
“Para desplazarme y andar con mayor seguridad utilizó la ciclovía, porque al llegar por la Bolívar esto me lo permite”, explicó Cáceres.
Mientras disfrutaba de la tarde con sus pequeños hijos, el señor Saúl Pérez estaba a bordo de una patineta eléctrica en la Ciudad Colonial. La motivación de Saúl para comprarse uno de estos aparatos fue ser fan de la “movilidad eléctrica” como él mismo confesó que es. “Yo tengo patineta eléctrica, carro eléctrico y trabajo en el ambiente de tecnología en la parte de este mismo género”, añadió.
Entre semana se mueve en su patineta, desde ir al trabajo hasta despejarse la mente, la diferencia de tiempo entre sus diferentes trayectos es alrededor de mucho más de 20 minutos.
¿Las calles de Santo Domingo están preparadas para las patinetas eléctricas?
Algo en común que han profesado los tres entrevistados es que las condiciones de las calles en el Gran Santo Domingo no se encuentran habilitadas de forma correcta, ya que con la vía más segura que cuentan es la ciclo vía y está debe ser exclusivamente destinada para quienes utilizan bicicletas.
Thomas Martínez consideró que “las calles de Santo Domingo no se encuentran aptas para este tipo de transito”. En su blog de Instagram como ciudadano ha resaltado que el carril de la ciclovía debe ser identificado de igual forma para las patinetas.
Motivos de su uso en la ciudad
Conoce el riesgo
Mientras que Gilberto Cáceres narró uno de sus días comunes transitando por la calle, “Uno porque es en buen dominicano, muy arretao, pero no hay condiciones, aquí hace falta mucha educación vial y concientización del ciudadano desde los choferes hasta los transeúntes, hay momentos donde debo bajarme de la patineta para poder transitar porque el suelo con hoyos no permite deslizarse con facilidad”.
“No tenemos la cultura del respeto y la conciencia de salvaguardar las personas que andan en la vía pública, yo corro el riesgo y trato de hacerlo a la defensiva ya que por donde vivo no hay ciclo vía”, externó Saúl Pérez.
En alquiler
Tanto en la Ciudad Colonial como en otros sectores de la capital hay bicicletas y patinetas en alquiler que utilizan dominicanos y extranjeros.