EDITORIAL
El presidente de la República Dominicana, Luis Abinader Corona, no se cansa de hablar de la supuesta autonomía del Ministerio Publico dominicano, pero previo a eso ha dicho que desde el año 2020, ya los fiscales son independientes, por lo que, si eso fue logrado nadie sabe la razones por la que continua con ese discurso solitario que solo esta en su boca y la de sus allegados que cobran un sueldito.
La página oficial de la presidencia de la Republica Dominicana, publico el día 6 de agosto del 2024, un titular noticioso que establece¨gobierno continúa el diálogo y celebra reunión con abogados para tratar reforma constitucional¨ y en esa nota da cuenta de que este martes se realizó, en el Palacio Nacional, un encuentro con más de 50 abogados, para socializar la propuesta de reforma constitucional presentada por el presidente Luis Abinader este lunes y que la reunión con los juristas fue presidida por el consultor jurídico del Poder Ejecutivo, Antoliano Peralta Romero, quien detalló las materias que serán objeto de modificaciones constitucionales, señalando que la intención del encuentro es recoger las observaciones y sugerencias que puedan fortalecer la propuesta.
En esa reunión asistieron y solo fueron invitados 50 abogados del PRM, no de los más ilustrados, que todos cobran un sueldo en el Estado y que jamás tendrían el valor para decirle al presidente la realidad de algunos puntos de su reforma, porque previamente el presidente dijo en la semanal, que no se permiten las disidencias y el que lo haga esta so pena, es decir, votado del puesto, así que con 50 esclavos invitados, el que invita paga, para no escuchar la verdad que necesitan oír de esos 50 abogados Perremeístas y donde no fueron invitados nadie mas que no sea del PRM y así si es bueno carajo, decir, hablar y oír lo que quieren oír.
Si el presidente de verdad le interesa ayudar al Ministerio público, su asesor debio decirle que invierta en la auto gestión interna, porque es bueno decir y saber, que algunos fiscales son muy humilde, efectivos buenos gestores y muy preparados, pero sobre todo muy honrados, pero eso son la minoría en el Ministerio público y casi siempre los limitan, no le dan espacio ni oportunidades y en su gran mayoría en el Ministerio público lo que hay es un caos, fiscales que no reciben a las víctimas o peticiones de los imputados, no reciben a los ciudadanos, que se sienten amenazados o perjudicados.
Mientas que, la realidad en muchas fiscalías es, que la mayoría de fiscales tienen un temperamento sumamente peligroso y muy malo, llegando a creer que la fiscalía, es de su propiedad o una oficina privada, y con un lenguaje sumamente lesivo, autoritario y con un alto nivel de humillación para los abogados y el presidente como hombre más informado del país sabe eso mas que todos los abogados que ejercen la carrera en el área penal, siendo así, algo esconden los empresarios con el deseo de hacer del Ministerio público dominicano algo inalcanzable para los seres humanos normales y pobres y crear las condiciones para que ellos tengan el control absoluto de las acciones publicas desde sus oficinas privadas, o desde las oficinas de sus abogados, para meter presos o sacar a quien ellos quieran.
El problema del Ministerio Público de la Republica Dominicana, no es de autonomía o independencia, es de auto gestión, problema que no se resuelve con más independencia o supuesta autonomía, porque si hoy es todo un verdadero desastre, cuando sean autónomos, solo el presidente, su asesores jurídicos y los funcionarios tendrán acceso a esos dioses del olimpo llamados fiscales, lo que equivale a decir, que el presidente esta creando una estructura legal silenciosa a lo interno del débil Ministerio Publico existente en la actualidad, solo para empresarios y poderosos y que el país se joda en su totalidad., por ahí andan las cosas y que lo sepa el mundo entero a través de este editorial, pero después que terminen sus 8 años de gestión el presidente y su grupo sabrán las consecuencias de sus actos, terquedad y falta de asesoría.
Diariodespertar.com, felicita a las fiscalas y fiscales humildes que están haciendo un gran trabajo, pero que no han sido tomados en cuentas. Ve que, dentro de la Procuraduría General y el Ministerio Público en sentido general, se ha creado una especie de estructura dirigencial personal, exclusiva y particular, dejando fuera a muchos fiscales honestos que no tienen quien influya por ellos en esa estructura, acción que lejos de hacer bien a la sociedad en la actualidad pone a la sociedad en peligro de un estallido social. Entiende que al presidente y sus empresarios le ha ido bien así y que quieren que todo continúe igual o peor, pero advierte que, eso es muy pasajero, pues en el año 2028, cuando ya no estén en el poder o subido en el palo, su propia sombra le perseguirá y le cubrirá y lamentarán haber sido tan tercos, orgullosos y optimistas con la autonomía del Ministerio Público, porque el problema del Ministerio Publico dominicano, no viene de influencia externa, sino de la mala administración interna y un fiscal no es honesto por ser autónomo, sino por ser ético justo y cumplidor de las normas.