Berlín es la ciudad del mundo donde más crecieron los precios de la vivienda residencial el año pasado, animada por aumento de la demanda, los bajos tipos de interés y la especulación inmobiliaria, muy alejada de su tradicional modelo de alquileres bajos.
En la capital de Alemania una casa cuesta hoy un 20,5% más que hace doce meses, según el estudio de Knight Frank, la mayor consultora inmobiliaria del mundo. Desde 2004 los precios han subido allí un 120%. La ciudad crece a razón de 50.000 habitantes nuevos cada año desde el último lustro. Ya son tres millones y medio de berlineses y se prevé que serán cuatro millones en 2035. La subida del precio de los alquileres está también aumentando la demanda de piso en propiedad.
Inversores internacionales, como Warren Buffett, están comprando allí, y el Banco Central alemán ya ha dado la señal de alarma del sobreprecio de la vivienda: un 35% en el caso de Berlín, y un 15% de media en el país.
Alemania tiene, además, otras tres ciudades en el «top ten» donde más se ha encarecido la vivienda, de una lista de 150 grandes ciudades del mundo analizadas. Hamburgo (un 14,1% más caro), Múnich (13,8%) y Fráncfort (13,4%). Alemania ha desplazado a China como el país donde más están subiendo los precios.
De hecho, en China, los precios se moderaron el último año debido al fin de los estímulos, los controles de capital y el comienzo de la normalización de la política monetaria. De las 15 ciudades chinas analizadas por la consultora británica, en 2016 los precios subieron un 23%. Sin embargo, en esas mismas ciudades los precios solo crecieron un 1,6% en 2017. En Pekín, de hecho, bajaron un 0,2%. Esta situación rebaja la media del alza del precio de la vivienda del mundo: en conjunto han pasado de crecer un 7% hace dos años a un 4,5% el año pasado.
La media mundial ha bajado, pero hay ciudades ajenas a esa tendencia, con subidas propias de un calentamiento de mercado. La segunda, justo detrás de Berlín, es Esmirna, la perla del Egeo. La tercera ciudad turca en tamaño, y segundo mayor puerto después de Estambul, ha visto encarecerse la vivienda un 18,5% en 2017. Reikiavik es la tercera, un 16,6% más cara, por delante de Vancouver (16%), Budapest (15,5%) y Hong Kong (14,8%).
Alemania no es el único país europeo con un fuerte crecimiento del precio de la vivienda. Las ciudades de los Países Bajos están en los niveles más altos entre las localidades analizadas por la consultora británica. Ámsterdam y Rotterdam, con un alza del 13,4%, entran en el «top ten», y Utrecht (11,4%) también está entre los veinte primeros.
Subidas en España
Madrid es la principal de las ciudades españolas donde más se encareció la vivienda en 2017, un 8,9%, según el análisis de la consultora Knight Frank. Ocupa el puesto 30 de las 150 analizadas. Le sigue muy cerca Barcelona, con un 8,2%, y Sevilla, con un 7,4%. La capital andaluza es la ciudad de la lista que presenta una mayor diferencia entre la variación de los precios en 2016 y en 2017. Hace dos años los precios habían caído un 9%.
Málaga, con un alza del 4,6%, y Valencia, con un 0,4% de subida de precio, son las otras dos localidades españolas analizadas.
No todas las ciudades del mundo están viendo encarecer el precio de la vivienda. En Italia, de hecho, ha habido una rebaja generalizada. En Roma, por ejemplo, los precios han caído un 2,7%, en Turín un 8,3% y en Nápoles un 1,7%. Las contadas subidas han sido moderadas, como en Milán, un 0,3% más caro que el año anterior. También han caído los precios en Grecia: Atenas, un 0,2% menos, y Tesalónica, un 0,5% más barato.