João Cerqueira de Santana Filho Habló lo que tenía que Hablar

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Esta semana la Prensa Nacional pidió la opinión del presidente Danilo Medina Sánchez en lo relativo a las declaraciones emitidas en Brasil  por el señor João Cerqueira de Santana Filho, a quien los funcionarios del gobierno actual del PLD le apodan por  cariño  y sociedad  (Joao Santana), en el sentido de que no financió las campañas del  presidente Danilo Medina Sánchez. No vaciló el presidente en responder ¨Joao hablo lo que tenía que hablar¨.

El problema grande del presidente Danilo Medina, es que Joao santana no habló una sola vez y si solo se toma una de sus declaraciones para beneficiarse de ella de manera temporal,  sería sacarlo de contexto y además muy riesgoso, pues dicen por ahí ¨Que no hay cosa más habladora que un investigado que vea en peligro su libertad o que esté preso¨ como ha sucedido  con Joao Santana, que cuando fue llamado con una acusación seria, cantó y señaló documentos irrefutables que ponen en peligro cualquier reputación y hasta la libertad  y permanencia en su puesto de cualquier presidente.

Ya se había aclarado con anterioridad en diariodespertar.com, que recibir fondos de una empresa cualquiera que aún no haya sido imputada, en campaña no es un delito y mucho menos está prohibido por la ley dominicana, así que el presidente y su equipo no debieron esconder esa relación con Joao Santana, que es un hecho por demás notorio, mucho menos negar haber recibido fondos de Odebrecht, porque los demás candidatos de la oposición casi seguro lo recibieron también.

El problema del presidente  no es haber recibido los fondos, el problema es negarlo todo, como si vivieran en un país de ciegos e ignorantes que no leen, ni manejan informaciones, ahí ha estado la situación de descrédito del presidente Danilo Medina Sánchez, que Joao santana y sus demás asesores andaban de gancho con sus campañas y  en un acto de traición ahora lo niegan, cuando previamente el mismo presidente le agradeció públicamente  a Joao santana.

Uno de los ministros del gobierno antes de que Joao Santana y Mónica Moura hablaran en Brasil por tercera o cuarta vez, había anunciado que próximamente estos hablarían y quedaría resuelto el problema de los comentarios que establecían que Odebrecht pagó la campaña del presidente, la pregunta sería ¿Cómo ese ministro sabía que estos imputados declararían en favor del presidente?, esta pregunta sería importante contestarla, porque las declaraciones ofrecidas por los imputados en Brasil se comenta que fueron influidas por enviados directos del gobierno o a través del hijo de Joao Santana, Ayle Axe de Souza Santana, quien permanece en el país todavía promoviendo la propaganda del gobierno, así que por el hecho de que el gobierno anunciara con anterioridad de que la cosa se aclararían con las declaraciones de esos imputados, nace la sospecha de que las declaraciones fueron amarradas de antemano, además de que las declaraciones de imputados ni por esos mundos de Dios,  ni en este Dominicano tienen mucho valor, mayormente cuando las declaraciones confrontan declaraciones anteriores de las mismas personas.

No existe la menor duda de que el caso Odebrecht ha dañado de manera grave la imagen del presidente, su entorno y del PLD, pues luego de las elecciones ha perdido más de 40 puntos, según la encuesta de diariodespertar.com y eso sí que es serio y delicado, pues mientras los hijos de Joao Santana y esposa Mónica Moura vivan en el país y trabajen en el gobierno, las cosas en vez de mejorar se agravarán.

Toda persona que tenga un mínimo de inteligencia debe saber que el daño que iba a realizar la compañía Odebrecht, Joao Santana, Mónica Moura, los hijos de esta y los brasileños en sentido general, ya está hecho y es irreversible y no existe posibilidad material de que el gobierno sobreviva a esa embestida, es decir, seguirá el gobierno pero su credibilidad desapareció y jamás en la vida será recuperada aun cuando sometan a la acción judicial a quien sea, incluyendo a Ángel Rondón o cualquier otro imputado.

Por otro lado, no se puede pretender echarle la culpa al procurador general de la República Dominicana de no accionar con rapidez, pues este no puede desmontar en un mes las trampas, trucos y engaños que los políticos dominicanos fabricaron en decenas de años, si en algún momento el Procurador General decide someter a alguien, bienvenidos serán los sometimientos y si no lo decide más bienvenida será la decisión, ya que con sometimientos judiciales no se resolverá el problema, pues quienes están involucrados en esos conflictos son personas de casi todos los Partidos Políticos que de aplicar justicia tendría la República que ser gobernada por otro país, pues todo el mundo caería preso puesto que ahí, el que no cojea con una mano, cojea de un pies como dice el refrán.

Diariodespertar.com entiende que el Presidente de la Republica Danilo Medina Sánchez cometió un error al aferrarse a las declaraciones de los perversos imputados Joao Santana y Mónica Moura, dándola como buena y válida en su defensa y además de nuevo reconociendo a Joao Santana como su vocero oficial al decir ¨Joao hablo lo que tenía que hablar¨, lo que significa que Joao Santana  maneja la voluntad del presidente  y que este reconoce que ya no debe de hablar, porque Joao hablo. Además cuando se divulguen los papeles y documentos esas declaraciones quedarán pequeñas y como se trata de declaraciones penales las realizadas por los imputados, pudieran servir como parámetro para una investigación, pero no como verdad que puedan liberar una estructura mafiosa, así que sería muy lamentable que sí de manera personal el presidente no está involucrado en esa estructura, lo involucran por falta de tacto y por los malos consejos ofrecidos por el grupo de funcionarios que lo rodean, cuyo único conocimiento que tiene y muy bueno, es de acumular riquezas en perjuicio del Estado, pero de derecho no saben nada, estos solo confían en la debilidad actual del Poder Judicial y del Ministerio Público que se encuentran amarrados como un buey en el tronco de un árbol que origina el fruto pecaminoso de la corrupción administrativa del gobierno.