EDITORIAL
El presidente sandinista José Daniel Ortega Saavedra (Daniel Ortega), su cómplice esposa Rosario María Murillo Zambrana (Rosario Murillo) y el Consejo Supremo Electoral (CSE) de Nicaragua, acaban de dar ¨un palo acechado¨ clavándole el cuchillo hasta la tasa como se dice vulgarmente a la democracia con el patrocinio y represión de una elección totalmente ilegítima, fingida y rechazada por casi todos los países del mundo y del Continente Americano, con excepción de las dictaduras de Venezuela y Cuba, quienes en cierto modo con su ejemplo han auspiciado esa dictadura en Nicaragua.
Nicaragua es un país de América Central ubicado entre el océano Pacífico y el mar Caribe, con una población aproximada de seis millones cuatro ciento noventa y seis mil personas (6.496.000.00), de los cuales cuatro millones cuatrocientos mil personas (4.400.000.00), estaban aptos para votar en las supuestas elecciones convocadas para este domingo 7 de noviembre del 2021.
En estas elecciones se discutían la presidencia y vicepresidencia, 70 diputados departamentales a la asamblea nacional, 20 diputados al parlamento centroamericano, 1 diputado en el escaño que se encuentra reservado exclusivamente para el presidente de la República saliente y un diputado reservado para el candidato presidencial perdedor, para un total de 92 diputados.
En esas elecciones fingidas utilizaron como estratégia para frustrarla, la designación de un nuevo Consejo Supremo Electoral en mayo de este mismo 2021 que responda a los intereses de los dictadores, apresaron a casi todos los candidatos, no permitieron propaganda, sometieron por supuesta traición a la patria a todos los opositores, obligaron a los empleados públicos a que asistan obligados a votar y restringieron la libertad de expresión en base a persecución militar y policial y del ministerio público, según informes de prensa internacional.
No obstante a todas estas maniobras, según notas de prensas, en esas elecciones fingidas de ayer 7 de noviembre del 2021, en Nicaragua solo votaron de manera obligada aproximada mente cuatrocientos ochenta y cuatro mil personas (484, 000.00) o sea un pírrico 11% en relación a la totalidad de los votantes y de ese 11% solo trescientos catorce mil (314,000), para un 65%, 8.4%, según la dictadura votaron por ellos lo que aun no ha sido declarado por el Consejo Supremo Electoral que este previamente designó, lo que significa que nadie votó y que son unas elecciones ilegítimas que desde ya, y con razón fueron calificadas por los Estados Unidos como ¨una pantomima injusta¨ y por la Unión Europea como ¨ ilegítima e injustas¨ y el mismo calificativo le han otorgado las mayorías de países democráticos del mundo.
El congreso de Estados Unidos aprobó este miércoles pasado por mayoría el proyecto de Ley Renacer, que establece sanciones muy duras contra el gobierno sandinista de Nicaragua, siendo esta la única medida concreta dirigida a castigar la dictadura.
Diariodespertar.com, felicita a los Estados Unidos y la Unión Europea, y a los países que se han pronunciado en contra del fraude mayúsculo, así como las medidas tomadas para el castigo de esos dictadores. Rechaza las elecciones fingidas, la pantomima de este día 7 de noviembre del 2021. Pide a Dios por los nicaragüenses que a partir de hoy han de recorrer un camino muy difícil y debemos ayudar en el trayecto para que no estén solos en la lucha contra la dictadura de José Daniel Ortega Saavedra (Daniel Ortega), su cómplice esposa Rosario María Murillo Zambrana (Rosario Murillo) y el Consejo Supremo Electoral (CSE).