Recientemente el gobierno dominicano anunció con bombos y platillos, a través de su súper Ministro, el impecable José Ramón Peralta, que se realizarían cambios sustanciales de funcionarios en el gobierno de Danilo Medina y una parte de la población se atrevió a creer en esas cosas que dijo ese Ministro, pero luego cuando llegó el día de la verdad, lejos de realizar cambios sustanciales, lo que hizo el gobierno de Danilo Medina Sánchez, fue provocar un escándalo con la designación de varios funcionarios en conflictos con la Ley Penal, como es el caso de Andrés Bocio Fortuna, Van Troy Suazo y otros.
Cuando una persona, institución, ciudadano o periódico se refiere a José Ramón Peralta, o a un funcionario de Danilo Medina, incluyendo a la Vicepresidenta Margarita Cedeño de Fernández, deben tener mucho cuidado, ya que estos funcionarios han tenido mucha suerte consiguiendo buenos abogados para someter a la acción judicial penal a cualquiera que opine, y evidentemente en los tribunales actuales hay que proteger la honra a esos funcionarios y quien lo acuse debe tener muy buenas pruebas para no salir con una condena en la costillas, y como nunca hay pruebas contra ellos, desde Marcos Martínez hasta Leonardo Faña, han salido condenados.
Las condenas referidas anteriormente, ponen a cualquiera a reflexionar, a la hora de mencionar unos de los funcionarios de Danilo Medina, no obstante a esto, hay que correr el riesgo de decir, que ese anuncio que realizó José Ramón Peralta, de supuesto cambio de funcionarios en el gobierno, constituyó la mentira e ilusión más gravosa que funcionario alguno haya podido emitir, pues, luego del anuncio no se realizó ningún cambio que se considere sustancial, es decir, todos los Ministros de Gobierno continúan en su lugar, sin que se realizara el más mínimo movimiento, lo que deja mal parado al gobierno dominicano cuando anuncia cosas que crean expectativas que no se cumplen y eso constituye una falta de los funcionarios y del gobierno y siembra la desesperanza en la población.
Al gobierno de Danilo Medina Sánchez nadie le estaba exigiendo cambios, fueron ellos los que hablaron de cambios, razón por la cual no se comprende la necesidad de mentir, pero no es extraño porque en los últimos años, en la República Dominicana todo lo relativo al gobierno es mentira y falsedad y las cosas del gobierno dependen mucho del color del cristal de quien lo mira, y quien opine lo contrario a la realidad que se observa, está sometido de inmediato y fácilmente cae preso y le niegan hasta el adiós.
Diariodespertar.com, lamenta que el gobierno sustituya su vocero oficial para dar anuncio a través de un vocero sin competencia para ello, pero más lamenta que las cosas que se anuncien resulten ser mentiras y que los ciudadanos tengan que permanecer en silencio para que no los condenen por difamación e injuria y tengan que pagar más de 500 mil o 2 millones de pesos de condena aunque el juez le perdone la sanción penal o no lo encuentre culpable.
