MIAMI, FLORIDA. El poder del mangú se impuso al corn flakes con leche. La novena dominicana mandó un mensaje contundente y confirmó por qué aparece en todas las quinielas como favorito al aplastar a su similar de Canadá en su estrenó en el Clásico Mundial de Béisbol.
La artillería quisqueyana desplegó un arsenal de 15 imparables, incluidos cinco extrabases y entre ellos dos cuadrangulares; el pitcheo respondió a las expectativas y contuvo tres jugadas defensivas infantiles para el triunfo 9-2.
Fue la novena victoria en fila en este tipo de competencia. El último revés lo tuvo ante Holanda en 2009.
El abridor canadiense, Ryan Dempster, que no lanzaba desde 2013, fue explotado con siete hits y cuatro vueltas en apenas dos entradas en las que utilizó 49 lanzamientos.
En el Marlins Park hubo de todo, incluso miles de globos en forma de plátano que se entregan al ingresar al parque. Desde camisetas en el dugout de los fenecidos Yordano Ventura (con el número 28) y Andy Marte (30) hasta un grupo de fanáticos con camisetas verdes que formaron con cartulinas la palabra Odebrecht. Y tanto ruido como banderas dominicanas entre los 27,388 asistentes.
Carlos Martínez trabajó cuatro entradas de tres hits, tres ponches y una carrera sucia con 53 pitcheos (el límite son 65 en la primera ronda) y el cuerpo de relevo sofocó los bates del trébol. Hansel Robles (5to), Fernando Abad (6to), Alexander Colomé (7mo), Dellin Betances (8vo), Fernando Rodeny hizo dos outs en el noveno y Jeurys Familia hizo el último out. Los canadienses pegaron el último de sus seis hits en el quinto, un doble de Dalton Pompey.
José Bautista despachó tres imparables, incluyendo jonrón y remolcó cuatro carreras; Welington Castillo la sacó y produjo dos, mientras que José Reyes despachó tres hits para encabezar una alineación en la que todos los integrantes conectaron por terreno de nadie.
Los criollos entrenan hoy en la mañana de cara a su próximo partido, mañana ante los Estados Unidos (7:00 PM).
El ataque dominicano comenzó en la segunda entrada. Nelson Cruz abrió la entrada con doblete al central, Adrian Beltré lo movió a tercera con roletazo a segunda, Gregory Polanco disparó sencillo por el medio del terreno productor de la primera vuelta, Welington Castillo despachó enorme cuadrangular por el prado derecho que puso el choque 3-0.
José Reyes le siguió con imparable entre primera y segunda, Manny Machado falló con elevado a segunda, Robinson Canó disparó imparable al derecho y José Bautista logró hit remolcador al right.
Los del norte del continente descontaron en el segundo. Jonathan Malo sacó rodado por el campo corto que Reyes recogió pero lanzó mal a primera y llegó hasta la segunda base, avanzó a tercera con rodado a primera de Dalton Pompey y anotó cuando el árbitro de home llamó balk (movimiento ilegal) a Martínez. El Tsunami resolvió ponchando a Justin Morneau y a Tyler O’Neill lo puso a batear rodado al campo corto.
En la apertura del quinto los canadienses se acercaron más. Peter Orr recibió a Hansel Robles con sencillo al central, Malo forzó por tercera y Pompey disparó doblete entre left y center field que llevó la segunda vuelta al plato. Robles apagó la rebelión ponchando a Morneau y O’Neill.
Pero los quisqueyanos volvieron a atacar en el quinto en una entrada que pudieron liquidar, pero solo hicieron una vuelta. Bautista abrió con incogible al central pero fue out en el plato cuando intentó anotar con doble al izquierdo de Santana, Cruz negoció boleto, Beltré bateó hit productor al izquierdo. Kevin Chapman sustituyó a Jim Henderson en el montículo y puso a batear a Polanco para force out en segunda y ponchó a Castillo.
En el sexto los de Tony Peña abrieron el partido. Reyes abrió con su tercer imparable y se robó la segunda, Machado pegó rodado que el torpedero no pudo manejar, Canó falló con elevado al centro. Chapman fue relevado por Dustin Molleken y Bautista lo recibió con su enorme cuadrangular por el izquierdo que produjo tres.
Beltré comenzó el octavo recibiendo cuatro malas, Polanco sacó hit al derecho, Castillo forzó por el campo corto y Reyes sacó línea a segunda que el intermedista Orr lanzó mal a primera tratando de lograr la doble matanza y entró la novena carrera.
