BOSTON. Las montañas de San Gabriel que brillan a la distancia serán una imagen bienvenida para los Dodgers de Los Ángeles luego de dos noches gélidas y desastrosas en el Fenway Park.
Los Dodgers lucieron también fríos y se extraviaron durante dos juegos en Boston, por lo que están atrás 0-2 en la Serie Mundial, una desventaja que en 22 años no ha sido revertida por ningún equipo para coronarse.
“La noche anterior en el bullpen tuvimos un par de calefactores funcionando”, aceptó. “Se sentía cálido allí, pero (sólo) para levantarse y moverse. No me sentía tan pegajoso como de costumbre cuando hay 23 ó 26 grados (75 ó 80 Fahrenheit)”
Acostumbrados al clima cálido y las suaves brisas del Oeste en la Liga Nacional, Los Dodgers no habían iniciado un partido este año en una temperatura menor a 14,4 grados Celsius (58 Fahrenheit). Al enfrentar una temperatura de 11,6 grados (53 Fahrenheit) al inicio del primer juego de la Serie Mundial, los Dodgers perdieron 8-4. El termómetro marcaba apenas 7,7 grados (46 Fahrenheit) el miércoles en el primer inning y el desempeño de Los Ángeles fue igual de frío al perder 4-2.
“Obviamente esta es la primera vez que jugamos en un clima como este; San Francisco un poco, pero nada como esto”, reconoció el manager Dave Roberts antes del segundo juego. “Así que es un ajuste, y eso es parte de la ventaja de la localía y especialmente estar en el bullpen, donde tienes un calefactor pequeño, pero aún tienes que calentarte. Es más que un desafío”.
Poco después de que los Dodgers llegaron a Boston el domingo, el as Clayton Kershaw fue en pantaloncillos cortos al Fenway para una sesión de bullpen.
“Sólo estoy tratando de acostumbrarme”, comentó.
Ryan Madson se mostró inusualmente abierto acerca de qué tan ajenos eran los Dodgers a las noches de finales de octubre en el noreste.
“La noche anterior en el bullpen tuvimos un par de calefactores funcionando”, aceptó. “Se sentía cálido allí, pero (sólo) para levantarse y moverse. No me sentía tan pegajoso como de costumbre cuando hay 23 ó 26 grados (75 ó 80 Fahrenheit). Así que voy hacer ese ajuste esta noche, moverme un poco más. Les voy a decir a los muchachos que no lanzaron la noche anterior, que se muevan un poco más de lo acostumbrado, muevan las articulaciones de sus rodillas. Pero tal vez son jóvenes y no lo sienten”.
El problema de Madson fue la falta de movimiento en sus lanzamientos, así como un cambio que tiró y se convirtió en un wild pitch. Ingresó en el juego en la quinta entrada para proteger la ventaja de una carrera con las bases llenas y dos outs, pero le dio base por bolas a Steve Pearce y permitió un sencillo productor de dos carreras de J.D. Martínez antes de lanzar una pelota fuera de control.
Si Los Ángeles se van a recuperar, será en casa. La temperatura para el primer juego de la Serie Mundial del año pasado en el Dodger Stadium fue de 39,4 grados Celsius (103 Fahrenheit). Se pronostica una temperatura más moderada para el viernes, cercana a los 29 grados (mediados de los 80 Fahreheit), cuando el novato Walker Buehler abra en un intento por iniciar una remontada.
Pero incluso si los Dodgers ganan al menos dos de tres juegos como locales para forzar que la serie retorne a Boston, aún tendrían que ganar al menos una vez en el gélido, peculiar y ruidoso Fenway. Hasta ahora no hay indicios de que puedan lograr esa tarea.