MARRUECOS. El cineasta estadounidense Francis Ford Coppola dijo hoy en la ciudad marroquí de Marrakech que cree que el cine puede cambiar el mundo, pero lamenta que está limitado por los principios mercantilistas.
Coppola, que preside el jurado de la actual edición del Festival Internacional de Cine de Marrakech, subrayó en rueda de prensa que el artista “no puede cambiar el mundo de un día para otro” porque existe “un poder” que influye sobre él y limita su libertad.
“Si quieren saber quién dirige el mundo hay que preguntarse sobre el poder que ejercen las empresas sobre los artistas”, dijo Francis Coppola, quien deploró el objetivo “lucrativo” de las empresas que dirigen el cine, en detrimento de la calidad del arte.
El director de la mítica trilogía de “El Padrino” (1972, 1974 y 1990) defendió el carácter “personal” de sus películas más allá de las preocupaciones comerciales.
Coppola preside la actual decimoquinta edición del Festival de Marrakech, después de que en ediciones anteriores lo hicieran la actriz francesa Isabelle Hubert (2014) y a su compatriota Martin Scorsese (2013).
El actual jurado está compuesto además por realizadores como la japonesa Naomi Kawase, el holandés Anton Corbijn, el francés Jean-Pierre Jeunet, el italiano Sergio Castellito y el danés Thomas Vinterberg las actrices Richa Chadda (India), Olga Kurylenko (Ucrania) y Amal Ayuch (Marruecos), y el humorista franco-tunecino Sami Buajila.
Los miembros de jurado coincidieron en la rueda de prensa de hoy sobre los valores de optimismo, convivencia y amor por los que aboga el cine en un mundo que vive una multitud de horrores.
En esta edición quince películas, casi todas operas primas o segundas obras de directores jóvenes, compiten por la Estrella de Oro, máximo premio de este festival.
En la anterior edición del Festival de Marrakech los galardones fueron para la película rusa “Corrections class” del director Ivan I. Tverdovsky, que ganó la Estrella de Oro, y la película suiza “Chrieg” de Simon Jaquemet, que obtuvo el premio del jurado.