El presidente de Kenia, William Ruto, anunció este sábado la llegada de otros 600 efectivos de su país para integrarse a la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad (MMSS), que, bajo el liderazgo de su nación, se empezó a desplegar hace tres meses en el empobrecido Haití para ayudar a la Policía a hacer frente a las sangrientas bandas armadas.
Ruto llegó este sábado al aeropuerto de la capital haitiana, Puerto Príncipe, donde fue recibido por el presidente del Consejo Presidencial de Transición (CPT), Edgard Leblanc Fils; el director de la Policía Nacional, Normil Rameau; y Ketleen Florestal, primera ministra interina en ausencia de Garry Conille, que viajó a Nueva York para participar en la Asamblea General de la ONU, hasta donde el presidente keniano de desplazará tras la visita de este sábado a Haití.
El líder keniano declaró que su visita a Haití tenía dos objetivos: el primero reunirse y compartir ideas con las autoridades haitianas, y el segundo visitar la base de la misión de apoyo a la seguridad en Haití, donde, según dijo en una rueda de prensa junto a Leblanc Fils, vio «mucho progreso» tras el despliegue de la misión, que cuesta con el visto bueno de la ONU.
Ruto admitió que mucha gente se mostró crítica y pesimista sobre la misión, aprobada en octubre de 2023 en respuesta a la solicitud hecha un año antes por las autoridades haitianas para erradicar la violencia de las bandas armadas.
Y aún persiste ese espíritu de «duda, crítica y pesimismo» porque la misión debería contar ya con 2,500 agentes, pero en la actualidad solo hay 400 kenianos.
Con la llegada de éstos, afirmó, hay mucha más seguridad en el aeropuerto, el Palacio Nacional, el Hospital Universitario Estatal de Haití, la Academia de Policía y también los puertos.
«Ahora estamos trabajando para reabrir las carreteras con el fin de abrir un poco más el país», dijo el gobernante keniano, quien afirmó que el espíritu «de escepticismo, dudas y críticas» está empezando a disminuir.
Sin embargo, sostuvo que la fuerza necesita los recursos y equipos para garantizar la seguridad en el país.
«Las tropas que tenemos en Haití no son suficientes. Deberíamos tener 2,500 hombres y mujeres en esta fuerza. Sólo tenemos 400. También tenemos problemas logísticos. Nos faltan recursos. No tenemos suficientes herramientas para continuar el trabajo», señaló.
Pero «hay buenas noticias. Muchos más países están empezando a comprometerse a ayudar a Haití. Habrá un despliegue de otros 20 países que se han comprometido a enviar personas para unirse a la fuerza multinacional».
Kenia enviará otras 300 personas en octubre, e igual número llegará en noviembre, prometió.
«El trabajo es difícil, pero somos capaces de hacerlo», dijo, señalando que Kenia está muy motivada en ayudar a Haití.
Por su lado, Leblanc Fils dijo que la fuerza «ha empezado a dar resultados», pero que «es necesario reforzar la misión aumentando el número de efectivos y equipos, para que pueda alcanzar su objetivo y permitir al Estado retomar la responsabilidad de la seguridad del país tras este apoyo»
El despliegue de la MMSS comenzó el pasado 25 de julio, con la llegada de 400 policías kenianos, a los que se han unido posteriormente soldados de Jamaica y Belice.
La situación de seguridad no ha registrado mejoras importantes en Haití, mientras que para finales de septiembre se espera que países como Bahamas, Barbados, Bangladés, Chad, Benín y Belice envíen efectivos al país, hasta completar unos 2,500 militares y policías.
El año pasado la violencia causó, entre muertos y heridos, ocho mil víctimas en Haití, donde los grupos criminales han llegado a controlar un 80 % de la capital, Puerto Príncipe, así como otras zonas del país, según cifras de la ONU.
En el primer semestre de 2024, las víctimas de la violencia se elevaban ya a casi 3,900, de acuerdo con un informe de la Oficina Integrada de Naciones Unidas en Haití (Binuh)