Las Vegas, Nevada. Saúl “Canelo” Álvarez deberá enfrentar a dos grandes rivales este sábado en el T-Mobile Arena de Las Vegas: al neoyorquino Daniel Jacobs en un duelo de unificación de títulos de peso medio y a la incredulidad de una parte de la fanaticada mexicana, que no termina por aceptarlo como uno de sus grandes campeones.
En lo que es ya el acostumbrado preámbulo a la celebración de las festividades del Cinco de Mayo, Álvarez (52-1-2) expone los cinturones de peso medio del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), Asociación Mundial de Boxeo (AMB), Lineal y Ring Magazine, ante un Jacobs (35-2), que por su parte, expone el fajín de la Federación Internacional de Boxeo (FIB) para definir al mejor de la división en la actualidad.
Bajo esas condiciones no es raro pensar que una victoria de Canelo le serviría para seguir cimentando su ya exitosa carrera, pero aún podría dejar con dudas a sus detractores, que lo etiquetan como un “niño bonito” del boxeo.
“Me he cansado de decirlo. La gente que quiera creer, que lo haga y la que no, nunca lo hará. Yo soy un boxeador que pelea por su país, por su gente. Soy un campeón y ante Jacobs voy a demostrar nuevamente que sigo mejorando. Le he ganado a los mejores, ¿qué más podría hacer?”, dijo Álvarez a la AFP.
Dura pelea
En esta ocasión, el pelirrojo peleador tendrá enfrente a un combativo oponente que, además de campeón, ha enfrentado a otros campeones como el kazajo Gennady Golovkin y que se ganó el apodo de “The Miracle” al superar un agresivo cáncer que lo había condenado a abandonar el boxeo definitivamente, según los doctores.
“Yo nunca retrocedo. Puedo decir que Canelo es el peleador más fuerte al que he enfrentado pero también puedo decir que yo soy el rival más duro que él ha tenido enfrente. Así que esta es simplemente la pelea del año”, señaló Jacobs a la AFP.
– “Tratar de acabarlo lo antes posible” –
Álvarez y Jacobs son dos rivales a modo, con pocas palabras de provocación pero buen físico, quijada de hierro y fama de no tener miedo al intercambio.
Así los describe el presidente de Golden Boy Promotions, Oscar de la Hoya, quien dice que el originario de Brooklyn fue la opción perfecta para el mexicano por sus credenciales.
“Lo veníamos siguiendo hace rato y entendimos que la pelea debía realizarse. Jacobs es un gran peleador y un tremendo ser humano”, apuntó De la Hoya a la AFP.
“A los mexicanos nos gusta ir al frente. He visto que a Daniel también le gusta dar guerra, así que esta puede ser el tipo de pelea que a nuestra gente le gusta. Yo solo puedo prometer que cuando suene la campana me voy a ir encima a buscar derribarlo. No sé cómo terminará la pelea pero voy a tratar de acabarlo lo más pronto posible”, agregó Álvarez.
El marco de festividades incluye la entrega al ganador del cinturón esmeralda del CMB confeccionado por artesanos huicholes y chiapanecos.