Incendio destruye el «séptimo cielo» del estadio Quisqueya

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El siniestro inició a las 6:20 de la tarde y fue sofocado tres horas y media después. Darán hoy detalles del origen

Un poderoso incendio causó daños severos anoche al área de prensa del séptimo cielo del Estadio Quisqueya Juan Marichal.

El fuego se desató a eso de las 6:20 de la tarde y afectó las instalaciones del parque del Ensanche La Fe por alrededor de tres horas y media, cuando fue cesado por el inminente esfuerzo del Cuerpo de Bomberos del Distrito Nacional. Las llamas iniciaron en la parte derecha del “Séptimo Cielo”, extendiéndose hasta el lado izquierdo, cuando arrasó con las cabinas de transmisión y la cafetería. Los cristales empezaron a explotar y los pedazos cayeron desde esa área ya descrita. Rápidamente, los jugadores de los Leones del Escogido y los Gigantes del Cibao fueron evacuados junto con el resto del personal del Estadio Quisqueya. A las 6:45 de la noche, se registró un apagón que dejó el estadio a sombras.

Ante lo sucedido, La Liga Dominicana de Béisbol (Lidom), procedió a suspender el partido que se llevaría a cabo anoche entre los Gigantes y los Leones, perteneciente a la segunda fecha del Todos contra Todos. La brigada de los bomberos del Distrito Nacional recibió una llamada de auxilio a las 6:32 de la tarde, transcurrió 10 minutos para que lleguen a la parte frontal del estadio, en la que comenzaron a apaciguar el fuego con tres camiones. Pero, se les dificultó el acceso, y penetrar el origen del incendio, según lo descrito por el coronel Rafael Del Rosario, jefe del Cuerpo de Bomberos del Distrito Nacional.

Luego, un camión de los bomberos ingresó al parque de béisbol por lado del dugout de los Leones, que se empleó parte de una estrategia para disolver el fuego desde las gradas. Acto que funcionó a las 9:05 de la noche, cuando se pudo estabilizar el vehículo de bomberos. “Debilitamos más el fuego por la parte frontal, pero es un estadio, son 115 pies de altura, al principio se dificultó el acceso. Hicimos una maniobra de sofocar el área delante, que nos tomó alrededor de dos horas para debilitar el fuego”, agregó Del Rosario. No hubo nadie lastimado, pero se perdieron todos los equipos de las transmisiones radiales tanto del Escogido, como de los Tigres del Licey. “Decidimos enfrentar el fuego, posteriormente, por la parte detrás que es ingresando al terreno de juego, en la que se dificultó estacionar el vehículo de bomberos. Las unidades necesitan un balance normal para poder agilizar las turbinas y bombear agua”, sostuvo Del Rosario.

El estadio no posee una protección contra incendios no más allá de los extintores. “Tres personas se quedaron dentro tratando de apagar el fuego con los extintores, pero no pudieron, inclusive arriesgaron sus vidas tratando de salvar esa área. Minutos después tuvieron que salir por la escaleras de emergencias por el incesante fuego”, indicó Vitelio Mejía, presidente de Lidom.