SANTO DOMINGO. Carlos Santana ha sido el pelotero de mayor trascendencia nacido y formado en Los Mameyes. Pero en este sector de Santo Domingo Este no eran muchos los que creían que quien fuera el jugador de más disciplina en el plato en 2016 en la Liga Americana (solo 19.8% de swing a pitcheos fuera de la zona) podía ser pelotero y sobraron las sugerencias de que se dedicara a otra cosa.
Sin embargo, Santana transformó esas energías negativas en estímulos para perseguir su objetivo, pero no quiere que esos fantasmas se reproduzcan por lo que se presta como instrumento emocional y material para ayudar a niños y jóvenes de su barrio a ver en el béisbol una opción para soñar y alejarse de la delincuencia.
Santana celebró ayer la tercera versión de un partido de softbol donde entregó utilería a las ligas mameyeras, llevó a Edinson Vólquez, al prospecto Amed Rosario y otros ex jugadores como figuras para compartir con los jóvenes, una iniciativa que tiene a su madre Nuris Amador como gran motivadora.
“Pasé mucho trabajo en mi niñez, no en mi casa porque tuve aunque sea un plato de comida todos los días. En la misma comunidad siempre hay unas cuantas gentes que quieren troncharle el camino a uno diciéndole cosas que no iba a ser Grandes Ligas, que me enganche a la Policía. Eso es una de las mayores razones por la que hago este juego, para hacerle creer a las personas y la comunidad que nunca devalúen a un pelotero, que nunca le quiten el sueño a un pelotero”, dijo Santana.
Amador explicó que tienen como objetivo crear una fundación que mantenga una vinculación más activa para ayudar al sector. Se llamará Slam-Tana, nombre con el que un grupo de fanáticos de los Indios lo bautizó el 29 de abril de 2011 cuando disparó su primer cuadrangular con las bases llenas en el Big Show.
“Este fue uno de los primeros plays donde jugué y venir aquí me llena mucho de emoción”, explicó el utility, formado en la liga Juan Carlos Ramos, receptor titular en el Clásico Mundial de 2013 y que acaba de jugar una Serie Mundial con Cleveland.
Las acciones de solidaridad de jugadores como David Ortiz y Robinson Canó también lo han estimulado.
Cuando los Dodgers deciden firmarlo por un bono de US$75 mil ya Santana tenía 18 años en 2004, pero hasta entonces no había generado gran interés, aunque su madre dice que nunca pedía juguetes para Reyes, sino pelotas, guantes y bates.
Es una carrera que le ha pagado US$19 millones, cobrará US$12 mm en 2017 antes de ser agente libre por primera vez en su carrera en octubre próximo cuando tendrá 32 años.
