La República Dominicana ha vivido momentos muy difíciles, tanto en el aspecto económico, infraestructural, educativo y político. Desde el año 1996, se han experimentado cambios significativos los cuales se han realizados en los gobiernos del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), incluyendo en el cuatreño 2012-2016 del Presidente Danilo Medina Sánchez. Desde el año 2012, han seguidos los cambios positivos, manteniéndose la estabilidad macro económica, la transformación educativa, aumento del empleo y la infraestructura del transporte urbano.
Danilo Medina Sánchez, es un Presidente humilde, apegado a la gente y al sentir de su pueblo, identificándose en todo momento con las necesidades primordiales de la nación, hombre de familia estable y confiable, con la cual ha servido de ejemplo a su entorno y las demás familias del país.
Con una nueva elección del Presidente Medina, el País no tendrá sobre salto ni sorpresa alguna, porque ya ha demostrado conocimiento y buen manejo de la cosa pública.
Con la posible elección de otro candidato, la sorpresa de la inexperiencia estaría al asecho, pudiendo convertirse el desorden en la regla y el orden en la excepción.
Danilo Medina, debe ser nueva vez Presidente de la República Dominicana para el período 2016-2020, porque su gobierno actual ha generado confianza en la población y ha garantizado los derechos individuales y colectivos, siendo merecedor de una segunda oportunidad de parte del pueblo dominicano.
Por: Smerlin Rodríguez Jiménez
